La "calculadora fotovoltaica", que así se llama esa herramienta, permite diseñar cualquier tipo de instalación, con distintas superficies, orientaciones e inclinaciones, "dando como resultado -explican desde Linkener- un informe muy potente y de gran detalle". Según la empresa valenciana, mediante la introducción de unos sencillos datos como son la dirección donde se realizaría la instalación fotovoltaica, la selección de las superficies a analizar, la orientación del tejado y el consumo energético del cliente, la persona interesada en realizar la instalación puede conocer cuántos paneles solares serían necesarios, qué potencia tendría la instalación en cuestión, cuánta energía autoconsumiría, cuánta vertería a red, cuál sería el precio de su instalación completa, el estudio de amortización y las opciones de financiación.
Sergio Ferrer, director ejecutivo de Linkener: “con los resultados obtenidos a través de la calculadora fotovoltaica, se obtiene un detalle muy real de lo que se va a hacer y lo que va a obtener el cliente tras la instalación. Además, antes de iniciar el proyecto, realizamos una visita técnica con la que verificamos que lo ofertado es factible, dando la tranquilidad al cliente de que no van a haber sorpresas. En Linkener analizamos todas las necesidades del proyecto y nos ocupamos tanto de realizar la instalación como de gestionar y tramitar todas las ayudas y subvenciones de las que se pueda beneficiar”
Subvenciones de hasta un 80 por ciento en el coste de la instalación
Con los actuales precios de la electricidad, una instalación fotovoltaica industrial para autoconsumo -explican desde Linkener- puede amortizarse en un plazo de 1 a 3 años. Además -añaden-, actualmente, los fondos Next Generation, sumados a los incentivos fiscales como la bonificación sobre el IBI y el IRPF, pueden llegar a suponer en una instalación doméstica hasta el 80% del coste de la instalación de autoconsumo, dependiendo del municipio en el que se encuentre.
Las subvenciones Next Generation son un compendio de ayudas creado por la Unión Europea para la ejecución de instalaciones ligadas al autoconsumo y al almacenamiento, con fuentes de energías renovables, promoviendo así las energías verdes y abogando por una mayor eficiencia y sostenibilidad.
Asimismo, el impuesto sobre bienes inmuebles es otro de los tributos que puede verse afectado si se dispone de una instalación fotovoltaica para autoconsumo. En este caso, es el ayuntamiento de cada municipio, el encargado de determinar la duración y porcentaje de deducción de dicha deducción.
En el caso de la Comunidad Valenciana -concreta la ingeniería levantina-, aunque hay municipios que todavía no bonifican el IBI, la media de duración de estas deducciones suele estar entre los 3 y 5 años con una bonificación de entre el 15 y el 50 por ciento.
Sergio Ferrer, director ejecutivo de Linkener: “las instalaciones fotovoltaicas tienen una vida media garantizada de más de 25 años. En el caso del sector doméstico, donde la potencia instalable es menor y el coste por vatio pico es mayor, las diferentes ayudas o bonificaciones fiscales son de gran utilidad ya que permiten reducir la amortización de la inversión de 6 a 3 años”
Según su perfil corporativo, Linkener Renovables ha realizado "en lo que llevamos de año" un total de 334 instalaciones fotovoltaicas, entre industriales y residenciales, lo que supone un incremento del 42% respecto al año anterior.
“En el 2021 duplicamos el número de instalaciones con respecto al año 2020 y, este año, casi hemos triplicado ese número. El crecimiento ha sido exponencial, a medida que los consumidores han visto que la crisis energética ha venido para quedarse y que el coste de la electricidad va en aumento, el número de solicitudes de instalaciones fotovoltaicas se ha disparado”, subraya el director ejecutivo de la compañía.
Credenciales
Linkener fue fundada en 2011 pero se materializó en el año 2014 con su actual modelo de negocio. Sus oficinas centrales están ubicadas en Go Hub, el espacio de 2.500 metros cuadrados en el que Global Omnium aloja en la ciudad de Valencia a cerca de 20 empresas especializadas en tecnologías disruptivas (machine learning, inteligencia artificial, big data, realidad virtual o robótica).
Linkener distribuye y comercializa sus soluciones tecnológicas a través de asesores energéticos, comercializadoras eléctricas, consultores o ingenierías cuyos clientes son empresas, industrias, corporaciones y edificios públicos en los que se pueden poner en marcha las soluciones tecnológicas que desarrolla.