La Fundación EDP ha suministrado e instalado 30 paneles fotovoltaicos que suman 15 kilovatios (kW) en la primera Reshogar con certificación Passivhaus en España, destinada a personas con discapacidad intelectual, "un proyecto pionero e impulsado por la asociación Círvite que se distingue por su alto nivel de eficiencia energética y sostenibilidad, marcando un hito en la atención especializada para este colectivo". El ahorro energético conseguido asciende a 6.000 euros anuales en suministros como climatización y electricidad, que se reinvertirán en mejorar la calidad de la atención de las personas, dando margen para la contratación, por ejemplo, de 400 horas extra de apoyos personalizados. Además, esta instalación evitará la emisión de 15 toneladas de CO2 a la atmósfera, lo que equivale a la plantación de 700 árboles.
Esta residencia cuenta con un área de atención diurna y un espacio residencial que ofrece cuidados a 44 personas, cubriendo sus necesidades médicas, psicológicas y sociales. Diseñada bajos los estándares de la certificación Passivhaus, desarrollada por el Passivhaus Institut de Alemania, la infraestructura cumple con los más altos niveles de eficiencia energética y confort. El diseño y construcción del centro reducen significativamente el consumo energético y la huella de carbono, mejorando al mismo tiempo el confort acústico y térmico para sus residentes, ofreciendo una mejor calidad de vida. El apoyo de la Fundación EDP forma parte del programa Solar Solidario, que promueve la instalación de paneles fotovoltaicos en viviendas de familias vulnerables o en locales de entidades sociales, con el fin de reducir el impacto medioambiental y mejorar su seguridad y bienestar.