La convocatoria para acceder a estas subvenciones a fondo perdido ha sido aprobada este lunes por el Consejo de Gobierno Insular, que considera "prioritario promover aquellas inversiones en el sector primario que fomenten mejoras en la eficiencia energética y la implantación de instalaciones de pequeña potencia, para el aprovechamiento de fuentes de energía renovable dirigidas al autoconsumo, en aras de reducir la huella ecológica en la Isla”. El documento aprobado -informa el Cabildo- recuerda que el Plan Estratégico del Sector Primario establece entre sus objetivos, por una parte, favorecer la sostenibilidad ambiental del sector primario, mediante el fomento de estas energías y, por otro lado, incrementar los niveles de competitividad de las explotaciones, a través de la reducción de los costes de los medios de producción.
El objetivo general que anima a la Consejería es "incentivar de forma activa la cobertura de demanda energética de las explotaciones y, con ello, sensibilizar y concienciar a las y a los productores primarios de la importancia de la sostenibilidad, del ahorro y de la mitigación de la huella de carbono de la actividad agraria".
La Corporación insular proporcionará así apoyo "a aquellas explotaciones del sector agrario grancanario que inviertan en instalaciones y equipamientos orientados a cubrir su demanda energética mediante la generación de su propia electricidad". Ello permitirá a la Isla toda reducir su consumo de combustibles derivados del petróleo (Canarias genera buena parte de su electricidad de ese modo), reducirá así pues la dependencia energética del territorio canario respecto de otros territorios (las islas importan todos los combustibles fósiles que usan) y reducirá por fin, así mismo, sus emisiones de gases de efecto invernadero. “Con ello -recalca el documento de convocatoria de estas ayudas-, se pretende favorecer la viabilidad de las explotaciones, al tiempo que se mejora la soberanía energética insular y su sostenibilidad ambiental”.
El objeto de la convocatoria -informa el Cabildo- es regular, atendiendo a esos objetivos, el "procedimiento de otorgamiento de subvenciones en régimen de concurrencia competitiva a las explotaciones agrarias de Gran Canaria". A la misma podrán acceder las personas físicas, jurídicas y comunidades de bienes que sean titulares de explotaciones agrícolas o ganaderas ubicadas en la Isla, y las y los titulares de una explotación agrícola inscrita y actualizada en el Registro Autonómico de Explotaciones Agrícolas (REA o Regepa) y/o de una explotación ganadera inscrita y actualizada en el Registro de Explotaciones Ganaderas de Canarias (Regac), radicada en Gran Canaria. En el caso de que se trate una persona jurídica, deberá tener como actividad principal la agraria, entendiéndose como tal aquella que obtenga al menos 50% de los ingresos.
Solo se subvencionarán -concreta el Ejecutivo insular- las inversiones destinadas a la implantación de instalaciones solares fotovoltaicas en explotaciones agrícolas y/o ganaderas. Además, la inversión en explotaciones agrarias deberá contar con una cobertura de entre el 80 y el 100% de la demanda propia, es decir, de la relación entre energía total generada por la instalación fotovoltaica y la consumida por la explotación agraria, ya sea de forma directa o compensada.
Por último, se establece un plazo de ejecución de los gastos e inversiones que discurre entre el 1 de enero de 2024 hasta el 31 de agosto de 2025. De esta forma, se entregarán 500.000 euros durante este 2024 y, en 2025, el medio millón de euros restante, una vez realizadas y comprobadas las inversiones.
Ayudas que superan los 2,6 millones de euros desde 2018
Esta es una nueva iniciativa de las que lleva poniendo en marcha la Consejería de Sector Primario, Soberanía Alimentaria y Seguridad Hídrica desde hace varios años, con el objetivo de impulsar implantación de energías renovables en explotaciones agrarias y en entidades pesqueras y con las que ya ha entregado 2.670.000 euros desde 2018.
Según los datos facilitados por el Cabildo, en 2020 se puso en marcha ya una convocatoria en la que se otorgaron 315.000 euros a 18 agricultores y ganaderos, que comportaron la instalación de 356 kilovatios hora (kWh), una cifra que supuso reducir la emisión de gases de efecto invernadero equivalentes a 433 toneladas de CO2/año.
Posteriormente -continúa el Cabildo-, en 2022, se volvieron a entregar al sector agrario ayudas por un importe total de un millón de euros, que llegaron a 71 beneficiarios y beneficiarias de 18 municipios. En esta ocasión, se instalaron 1.133,38 kWh, lo que implica un descenso de las emisiones de 1.377,05 toneladas de CO2/año.
Por su parte, el sector pesquero, a través de las cofradías y de las cooperativas de pescadores, también recibe fondos del Cabildo a través de las convocatorias a anuales, que se desarrollan desde 2018 hasta el presente ejercicio y en las que se han entregado en total 355.000 euros, con los que se han instalado 267 kW, que evitan la emisión de 199,1 toneladas de CO2/año.