Según publica el sitio GTM , un representante de Tesla explicó por mail las causas de la medida, de la cual nada se había informado públicamente. "Hemos visto un enorme interés en el Daily Powerwall (el modelo de 7 kWh) en todo el mundo, modelo que es compatible con aplicaciones de uso diario, como el autoconsumo solar más energía de respaldo, y puede ofrecer soporte de seguridad simplemente modificando la forma en que se instala en una casa. Debido al interés, hemos decidido concentrarnos en este momento por completo a la construcción y el despliegue de la batería Powerwall de 7 kWh".
Debe aclararse que los precios de venta presentados en su momento para las baterías de 10 y 7 kWh eran de 3.500 y 3.000 dólares, respectivamente. La primera de ellas, como queda dicho se presentaba como una batería de reserva de 500 ciclos, es decir la cantidad de veces que se carga, y que esa carga es utilizada de forma completa.
El punto parece estar en que existen en el mercado baterías que si bien no son de ion-litio como la de Tesla, incluso convencionales de ácido, permiten 1.000 ciclos de carga y a la mitad de precio. Además, las empresas que las ofrecen al mercado presentan condiciones de financiación en la compra, cosa que la empresa que lidera Elon Musk ni siquiera planteó.
Comparativamente, la batería Powerball de 7 kWh (en rigor, 6,4) diseñada para uso diario, permite cerca de 5.000 ciclos.