En enero de 2011, el exalcalde de Madrid, Alberto Ruíz-Gallardón, y Ana Botella, entonces teniente de alcalde y delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento, anunciaron que en unos días el complejo de biometanización de Valdemingómez estaría a pleno rendimiento. No fue así. Un año después, el 22 de marzo de 2012, Miriam Sánchez compareció ante la comisión de Medio Ambiente, Seguridad y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid para informar sobre el proceso de producción de biometano de las plantas de La Paloma y Las Dehesas de Valdemingómez y la inyección en fase de pruebas en la red de gas convencional. Parece ser que todo se quedó aquí, en pruebas.
Durante todo este tiempo la oposición ha denunciado el sobrecoste económico que ha ocasionado la instalación y el retraso en poner en funcionamiento este sistema, que purifica el biogás producido en la digestión anaerobia de los residuos orgánicos para convertirlo en biometano disponible para usarlo como combustible en el transporte o inyectarlo en la red. En abril de este año, El País publicaba una información de Bruno García Gallo en la que se contaba que “el gas producido en Valdemingómez no cumple aún todos los requisitos para sumarse a la red general de Enagás. No alcanza el porcentaje de metano suficiente a un flujo constante”. Conclusión: no se inyecta un metro cúbico.
Cinco llamadas y tres correos sin respuesta
Energías Renovables se puso en contacto con el Ayuntamiento de Madrid para conocer su versión y este nos mandó un despacho de Europa Press con la siguiente información: “El Ayuntamiento de Madrid ingresó 302.000 euros el ejercicio pasado por la comercialización de biogás, como ha informado Miriam Sánchez en la comisión ordinaria de Medio Ambiente y Movilidad. Sánchez ha recordado que la inyección de biogás de las plantas de biometanización de La Paloma y Las Dehesas de Valdemingómez tiene un objetivo medioambiental, que pasa por reducir el CO2 por la gestión de los residuos. Dicho objetivo se está cumpliendo sobradamente en los tiempos previstos, más o menos. El decreto de comercalización fue adjudicado a Cepsa”.
Ni el importe ni el concepto de “comercialización de biogás” cuadran con las ventas esperadas de “biometano”, por lo que se requirió una información más precisa: ¿está o no está vertiendo biometano Valdemingómez en la red de Enagás? Tras cinco llamadas telefónicas y tres correos electrónicos aún no podemos informar a los lectores sobre este punto porque el Ayuntamiento no ha contestado. Algo que el consistorio se encargó de vender a los cuatro vientos como un sistema pionero y como una inyección hecha está en el limbo y con todas las sospechas de que no ha vendido nada como biometano.
Según añadía la información de El País, en el mejor de los casos la inyección debe esperar al verano de este año, tras solucionar los problemas técnicos no previstos en los plazos de entrada en funcionamiento, que era febrero de 2012 en el peor de los casos. Recuerda que la inversión total en las dos plantas de biometanización es de 288 millones entre 2005 y 2026; es decir, casi 14 millones al año. Si realmente los 302.000 euros de las ventas de 2012 fueron de biometano o se confirman las previsibles para 2013 (874.000 euros), las instalaciones es posible que alcancen su amortización cuando acaben su ciclo de vida.