Los beneficios de E.ON, en comparación con el mismo período del ejercicio anterior, se redujeron "en 200 millones de euros por las desinversiones y en 100 millones de euros debido a la menor producción y los márgenes más reducidos en la generación a base de combustibles fósiles", según la nota de prensa que ha difundido sobre el particular la compañía. Los beneficios -dice E.ON- se vieron sin embargo "afectados positivamente por un ahorro en costes de 100 millones de euros logrado gracias al programa de mejora de la eficiencia E.ON 2.0 y a mayores beneficios en el área de Renovables, derivados principalmente de un aumento en la capacidad de generación instalada". E.ON asegura en todo caso que sus resultados trimestrales "se ajustan a sus previsiones".
Desinversiones
Otros datos señalados en ese balance son los siguientes: las inversiones del Grupo E.ON en el primer trimestre "descendieron un 21% interanual, a los 900 millones de euros"; su flujo de efectivo de explotación, de 1.600 millones de euros, "fue considerablemente superior a la cifra del ejercicio anterior, de 400 millones de euros"; la deuda neta económica de E.ON se situaba en 31.600 millones de euros a 31 de marzo de 2013, con un descenso de 4.300 millones de euros respecto a la cifra al final de 2012; "la principal causa de la mejora fue que el producto de las desinversiones y el flujo de efectivo de explotación positivo sobrepasaron considerablemente los gastos por inversión"; y la deuda financiera neta "descendía a 10.400 millones de euros a la fecha de cierre del primer trimestre".
Un parque fósil de más de 4.000 MW
E.ON prevé que su Ebitda del ejercicio 2013 se sitúe entre 9.200 y 9.800 millones de euros. Esta previsión -dice la compañía- tiene en cuenta la pérdida de flujos de beneficios por ventas de activos de acuerdo con el programa de desinversión de la compañía. E.ON prevé un BNS 2013 de entre 2.200 y 2.600 millones de euros. E.ON España tiene en nuestro país un parque instalado de aproximadamente 4.420 MW de energía convencional (3.422 MW) y renovable (unos 1.000). Además, distribuye y comercializa electricidad a más de 670.000 clientes a través de una infraestructura de 33.000 kilómetros de red. La multinacional alemana, que tiene un par de centrales de biomasa en Cataluña, cuenta con un parque eólico nacional que suma 382,5 MW. [En la imagen, sede de E.ON en Santander].