Situado en el Istmo de Tehuantepec, el parque, que cuenta con un factor de productividad de alrededor del 40%, según Gamesa, puede llegar a producir "más de 250 millones de kWh al año de energía limpia, evitando así la emisión de 100.000 toneladas anuales de CO2". En México, Gamesa desarrolla tanto su actividad de promoción y venta de parques eólicos, como el suministro, instalación y mantenimiento de aerogeneradores. La multinacional vasca declara más de cien megavatios puestos en marcha, otros setenta en fase de construcción y, asimismo, en diferentes fases de desarrollo", una cartera de 144 megavatios más.
A estas alturas, la compañía presume de haber instalado ya "más de 540 MW en Latinoamérica, en países como México, Honduras, Costa Rica, Venezuela, etcétera". Más aún: en el primer trimestre de 2012, "las ventas de aerogeneradores en esta región representaron el 30% del total de megavatios vendidos por la compañía". Con dieciocho años de experiencia a sus espaldas, "la compañía cuenta con centros productivos en Europa, Estados Unidos, China, India y Brasil, una plantilla de 8.000 personas con amplia experiencia internacional y una cartera de 24.000 MW en diferentes fases de desarrollo en Europa, América y Asia".