Las actividades que serán vendidas -informa la compañía alemana- incluyen todos los negocios de E.On en España y Portugal, "que comprenden los 650.000 clientes de electricidad y gas, y los 32.000 kilómetros de red de distribución eléctrica". Además, la compañía eléctrica tiene, en la península ibérica, "una capacidad instalada total de generación de cuatro gigavatios, entre carbón, gas y energías renovables y, así mismo, aproximadamente 1.200 empleados". La transacción está aún sujeta a la aprobación de la autoridad de Competencia de la Unión Europea, según E.On. La empresa prevé en todo caso cerrar la operación "en el primer trimestre de 2015". E.On define a Macquarie European Infrastructure Fund (MEIF4) como "un fondo especializado en infraestructuras, focalizado en inversiones a largo plazo (MEIF4 invierte en nombre de fondos de pensiones e inversores institucionales)". La operación de la que informara ayer E.On incluye también a Wren House Infrastructure, que "se convertirá en inversor minoritario en los negocios en Iberia, junto con Macquarie Fund". Wren es una entidad dependiente del fondo soberano kuwaití (Kuwait Investment Authority).