Un sistema energético basado en renovables conlleva una gran implicación social y por tanto política. Con las energías renovables, la energía primaria no es traída y llevada de aquí para allá como se hace con las fósiles o la nuclear, sino producida en el propio territorio. Es, por decirlo así, “más nuestra” y el compartirla cohesiona espacios políticos.
Vertebrar Europa
Con la firma del Pacto Verde Europeo (PVE) la Comisión abrochó la cremallera con la que ir vertebrando el futuro sistema energético de la UE. Los dientes de esta cremallera se van cerrando con la actualización periódica de la directiva sobre renovables (RED).
Sin embargo, se empieza a echar en falta la existencia de grandes corredores eléctricos concebidos con visión del conjunto de la Unión. Por ello, hubiese sido necesaria a priori, una iniciativa de la Comisión, que incluyese corredores transeuropeos, conectando el Norte con el Sur y el Este con el Oeste. Se permitirían así intercambios eléctricos directos y fluidos entre los diferentes países, haciendo realidad el Mercado Interior de la Electricidad (MIE) y ahorrando además cuantiosos costes de almacenamiento.
A falta de estos corredores, Francia terminará siendo la mediadora energética europea, gracias a su posición geográfica. Lo cual distorsionará el libre mercado al condicionar su ámbito. Así, cuando en las actualizaciones de la RED se discuten temas como el trato dado a la nuclear o el asunto del H2 verde o rosa, la discusión está viciada por la desigualdad que, si no se evita, tendrán las diferentes entidades para comerciar entre ellas, dependiendo de los países en que estén.
En particular y en pro de la vertebración de la UE, se debería acabar con la subordinación energética estructural que tiene la Península Ibérica respecto a Francia, beneficiando también a un gran número de países del norte de Europa que aspiran a intercambiar su eólica con nuestra solar.
Para ello, creo interesante el diseño conceptual realizado por la empresa ABB de un corredor eléctrico en base a líneas de gran potencia en corriente continúa (UHVDC) que viene representado en la figura inicial.
En el caso que nos atañe, usaríamos la parte suroeste de la red que tiene forma de Y inclinada, pero con su nudo ubicado en Lyon. Para ir hacia el: SO, paralela al Corredor Mediterráneo ferroviario hasta Algeciras; NE, seguiría paralela a dicho corredor hasta la frontera de Hungría con Ucrania; N, por Francia hasta conectar con un nudo adecuado en Alemania.
Configurar España
Aquí tenemos que decidir si:
– Nos interesa exportar energía con bajo valor añadido como es el H2 verde, o preferimos fomentar y atraer industrias en base a nuestros bajos costes energéticos.
– Dejamos de regar tierras por disponer cada vez de menos agua debido al aumento de la evapotranspiración y a cada vez más recurrentes sequías, o acometemos un plan de desalación con bombeo basado en el bajo coste de las renovables que compense lo anterior.
– Alargamos la vida de las centrales nucleares o las clausuramos según programa.
– Dejamos que la hidráulica, y en especial la estacional, siga siendo explotada con objetivos puramente empresariales, o hacemos que dicha explotación se haga buscando el interés nacional.
Las decisiones que se tomen ahora respecto a estas cuestiones y la capacidad y firmeza con que nuestro gobierno influya en las resoluciones tomadas a nivel europeo, serán fundamentales en el largo plazo. Por ello, ningún gobierno, al que elegimos solo por cuatro años, tiene autoridad moral para decidir sin contar con el resto de las fuerzas políticas y de manera especial con las que son posible alternativa de gobierno.
Porque de ellas dependerá la diferente configuración económica y social de nuestro país. Por eso es tan importante que ejercitemos nuestro derecho al voto en las próximas elecciones y posteriormente que toda la sociedad civil clame por los necesarios consensos políticos sobre estos temas.