El control de los datos del contador es una cuestion absolutamente estratégica para el diseño de un sistema encaminado a la esclavitud del consumidor y no a su democratización y, para evitar esto, debe estar en manos de los usuarios y no de la distribuidora eléctrica.
Cuando alquilamos un bien o lo adquirimos en propiedad lo hacemos para nuestro disfrute. A nadie se le ocurre alquilar un piso para que lo habite el casero o comprarlo para que lo utilice el banco que nos dió la hipoteca. Esto sólo ocurre con los contadores eléctricos y no hay razón alguna para que se nos imponga por ley.
La información que pueden proporcionar los "contadores inteligentes" no es necesaría para la gestión de la red eléctrica porque para obtener los datos necesarios para mantenerla en perfecto estado en absoluto hace falta hilar tan fino como para llegar a conocer lo que consume un usuario cada instante, por tanto las distribuidoras no estan legitimadas para obtenerlos.
Actualmente la única misión del contador es proporcionar a la eléctrica los consumos necesarios para la facturación, por tanto esa es la única información que se debe aportar.
Cuendo hace unos años se inició la campaña para convencernos de la necesidad de cambiar los contadores, primero lo intentaron por las buenas argumentando que sería util para el usuario porque así podría gestionar sus consumos adaptandolos a aquellos periodos en que el precio fuera mas barato. Pronto vieron que por ahí no llegaban a ninguna parte porque la gente no es tonta y ya existen en el mercado infinidad de aparatos que, por un precio mínimo, cumplen esa función sin necesidad de contar con la eléctrica para nada. Se pueden obtener datos, descargables en nuestro ordenador a traves de internet, con curvas de carga, registros de potencias y tensiones, etc. que, aunque para el consumidor doméstico tiene poca utilidad adquirirlos (basta ponerlo una semana para ver como funciona nuestro hogar y podemos luego pasarlo a los amigos para que repitan la operación en sus casas como se está haciendo en los grupos locales de Som Energía), pueden representar importantes ahorros en el caso de industrias o actividades económicas.
Así que, una vez mas, las eléctricas del oligopolio han optado por el rodillo dando instrucciones a sus lacayos del Ministerio de Industria para hacer una ley que obligue a los ciudadanos a disponer del contador electrónico. Por supuesto a su costa aunque sea para beneficio exclusivo de las grandes eléctricas propietarias -por la gracia de Dios-, de las líneas de distribución. Y además, puesto que no se justifica que el contador proporcione a las distribuidoras mas datos que los necesarios para la facturacíón, tirando una vez mas por la calle del medio se sacan de la manga la destarifada idea de facturar por horas aun a sabiendas de que es imposible porque las mismas eléctricas no disponen del sistema para hacerlo. Pero eso no importa, lo importante es convencer a la ciudadanía de lo necesario que es imponer el contador "inteligente" para abaratar el recibo de la luz.
¿Hasta cuando nos seguiran colocando tales patrañas?
Para abaratar el recibo de la luz lo primero es eliminar todas las trabas absurdas a la autoproducción (que, recordemos, no aumenta el sacrosanto deficit de tarifa) y lo segundo hacer una auditoría de costes del sistema eléctrico despojandolo de todas las prebendas que disfrutan en la actualidad las grandes electricas de Unesa y algun consumidor importante.
Si queremos caminar hacia un sistema eléctrico democrático mi propuesta es sencilla: el contador debe ser gestionado por el usuario (individual o colectivo) que solo enviará a la distribuidora los datos que se necesiten para la facturación. Las distribuidoras sólo tienen derecho a verificar que los datos se les envian correctamente y son ellas las que deben pagar por el servicio de lectura que les prestan "nuestros" contadores instalados en "nuestra" propiedad. De ninguna manera pueden enviar ordenes a nuestro contador a distancia. ¿Quien nos garantiza su honradez? ¿Los mismos que del gobierno pasan directamente a sus consejos de administración?.
Lo del sector eléctrico está alcanzando tales cotas de absurdo e injusticia que ha conseguido sacar a los ciudadanos a la calle. Lo de los contadores inteligentes sólo es un paso mas en el diseño de un sistema que nos lleva a la esclavitud, ya está poniendo en pie de guerra a las asociaciones de consumidores y pronto a todos los ciudadanos de bien que están mas que hartos de que les hagan comulgar con ruedas de molino una y otra vez.