La Estrategia Nacional del Hidrógeno de Portugal considera que este gas -producido con energías renovables- constituye "una importante oportunidad estratégica" y se plantea como objetivo último "convertir Portugal en un país exportador". El buque insignia de esa estrategia es el proyecto Sines, que pasa por la inversión de 2.850 millones de euros en un centro
de producción de hidrógeno verde en esa localidad (el estado portugués ofrece 4.000 hectáreas de suelo de su propiedad en este emplazamiento). Sines produciría hidrógeno con un parque de generación eólica y solar de más de mil megavatios de potencia y con agua de mar como materia prima. Portugal define Sines como "proyecto ancla de escala industrial".
Esta gran factoría de hidrógeno (H2) contará además con un Laboratorio de I+D y una fábrica de electrolizadores. Sines producirá el H2 verde con electrolizadores (1.000 megavatios de potencia), deberá estar en marcha antes de 2030 y debe posicionar este emplazamiento como plataforma para la exportación global de este gas renovable. El Gobierno de Portugal
estima que esta factoría de H2 producirá entre 35 y 175 mil toneladas de hidrógeno al año (en función del perfil anual de generación de electricidad, que calcula variará entre las 2.000 y las 8.750 horas). La materia prima a partir de la cual Sines fabricará su hidrógeno será como se dijo agua de mar (alrededor de 1,7 millones de metros cúbicos de agua al año).
El Gobierno de Portugal prevé comenzar a operar los primeros electrolizadores en el bienio 2022-2023.
La Estrategia Nacional del Hidrógeno de Portugal, que sostiene que el H2 "facilitará y acelerará la transición energética", trabaja con seis premisas:
(1) el hidrógeno complementa la estrategia de electrificación portuguesa, reduciendo los costes de la descarbonización (la Estrategia portuguesa del hidrógeno asegura que el hidrógeno es un vector de descarbonización que va a tener un gran impacto en los sectores de la Industria, el Transporte y la Energía "como solución coste-eficiente en el medio plazo");
(2) el hidrógeno refuerza "sustancialmente" la seguridad de suministro;
(3) el hidrógeno reduce la dependencia energética, habida cuenta de que será producido con energías renovables, ergo autóctonas (Portugal estima que en 2030 podría ahorrarse importaciones de gas natural por valor de entre 300 y 600 millones de euros);
(4) el hidrógeno reduce las emisiones de gases de efecto invernadero en varios sectores específicos (según la Estrategia, el hidrógeno verde puede sustituir a otros combustibles fósiles en los sectores del refino, químico, metalúrgico, cementero, minero, cerámico y del vidrio);
(5) promueve la eficiencia en la producción y consumo de energía gracias a que propone soluciones escalables, implementables en las proximidades de los lugares de consumo y distribuibles por todo el territorio (la Estrategia reconoce que el hidrógeno constituye "una oportunidad para hacer viable la actual infraestructura de gas natural, apalancando la complementariedad entre el sector eléctrico y el sector del gas");
y (6) promueve el crecimiento económico y el empleo, que estarían asociados al desarrollo de nuevas industrias y servicios asociados (la Estrategia pone el ejemplo de Salvador Caetano, que "ya produce autobuses de hidrógeno").
El Ejecutivo luso recoge en su Estrategia las fortalezas que convierten Portugal en el lugar idóneo para apostar por el H2
(1) demanda: existencia de industrias pesadas, electrointensivas (grandes demandantes de energía), como la del acero, las refinerías o las químicas;
(2) agua: acceso a recursos hídricos abundantes, técnicamente viables sin necesidad de incurrir en incrementos significativos de costes;
(3) renovables: elevada disponibilidad de recursos energéticos renovables. Según la Estrategia lusa, "se considera que la producción de hidrógeno es competitiva con precios de la electricidad que estén por debajo de los 25 euros el megavatio hora. Pues bien, en la subasta solar fotovoltaica llevada a cabo el año pasado en el país, precisamente en el mes de julio -recuerda el Ejecutivo luso-, se alcanzó el precio más bajo jamás registrado: 14,76 euros el megavatio hora (la media quedó en 20,33).
(4) disponibilidad de territorio: según la Estrategia, para poner en marcha 100 megavatios de electrolizadores bastan 600 metros cuadrados;
(5) existencia de un marco político favorable y de mecanismos de apoyo;
(6) un mercado eléctrico en el que hay un número significativo de horas en las que el precio de la electricidad es bajo (elevada disponibilidad de electricidad renovable o accesos a PPAs [contratos bilaterales de compraventa de electricidad de largo plazo]);
y (7) acceso a infraestructuras de transporte: gasoductos y puertos (puerto de aguas profundas en Sines).
A partir de esos mimbres, la Estrategia plantea varios objetivos: el hidrógeno debe abastecer un 5% del consumo final de energía en el año 2030 (el horizonte temporal siempre es ese: año 2030); un 5% en el consumo del sector industrial; un 5% en el consumo del sector transporte; un 15% de inyección de hidrógeno en las redes de gas natural; entre 50 y 100
hidrogeneras (estaciones de servicio de hidrógeno); y dos gigavatios (2.000 megavatios) en electrolizadores.
Portugal quiere lograr que la Unión Europea declare Sines Proyecto Importante de Interés Común Europeo
La Comisión Europea lanzó en el año 2018 el Foro Estratégico para los proyectos importantes de interés común europeo con el objetivo de establecer una metodología que permitiese identificar las cadenas de valor estratégicas industriales para la Unión Europea (UE). Dicho Foro, compuesto por asociaciones, grupos de interés y Estados Miembros, y presidido por la Comisión Europea, decidió que el hidrógeno verde debía considerarse una cadena de valor estratégica industrial para Europa (se considera hidrógeno verde todo aquel que proviene de fuentes de energía renovables). Pues bien, con el objetivo de apoyar esta cadena de valor industrial, la Comisión Europea está actualmente impulsando una iniciativa IPCEI (Important Projects of Common European Interest).
Portugal considera que "esta iniciativa puede ser clasificada como un proyecto IPCEI". Según el Ejecutivo luso, Sines, que constituye una importante oportunidad estratégica para el país, es al mismo tiempo de gran interés para la Comisión Europa, pues "contribuye al logro de un importante objetivo europeo" (la neutralidad carbónica en 2050). En ese marco, el Gobierno de Portugal invita a todos los actores del sector a participar en Sines, "garantizando la coherencia estratégica nacional y europea en este campo" (el del hidrógeno). "Instamos a los players internacionales a participar en este proyecto". Para enviar su Manifestación de Interés en el plan, las empresas deben cumplimentar el formulario de resumen del proyecto disponible y enviarlo agabinete.seaene@maac.gov.pt hasta el 17 de julio.
Aviso de Manifestaciones de Interés
El objetivo de este aviso de manifestación de interés es identificar proyectos asociados a la industria manufacturera susceptibles de participar en una iniciativa IPCEI de hidrógeno verde. El objetivo de los IPCEI es contribuir al crecimiento económico, a la creación de empleo y a la competitividad de la industria y la economía de la Unión Europea, teniendo en cuenta los efectos de arrastre positivos en el mercado interior y la sociedad. La Manifestación de Interés permitirá identificar a las entidades que desarrollan proyectos industriales manufactureros de la cadena de valor del hidrogeno verde y que podrían participar en un Proyecto importante de interés común europeo (IPCEI) destinado a acelerar el desarrollo del sector industrial del hidrógeno en toda la cadena de valor.
Se considera que los proyectos tienen que cubrir algún aspecto industrial de la cadena de valor del hidrógeno: producción, almacenamiento, transporte y distribución de hidrógeno, usos industriales del hidrógeno, usos del hidrógeno para la movilidad o usos del hidrógeno renovable para redes, entre otros. El objetivo es identificar proyectos de I+D+i de empresas de la industria manufacturera, tanto en proceso como en productos que permitan combinar el desarrollo de una oferta industrial competitiva con el despliegue de los usos del hidrógeno y/o la infraestructura asociada. Los proyectos deberán cubrir alguna de las fases de la Investigación, Desarrollo e Innovación y/o del primer despliegue industrial (FID: First Industrial Deployment) siempre que este se derive de una actividad de I+D.
Se entiende como primer despliegue industrial aquellas inversiones que supongan la transición de instalaciones piloto a una escala mayor o los primeros equipos e instalaciones de su tipo que cubren las etapas posteriores a la línea piloto, incluida la etapa experimental o de prueba, pero no la producción en masa.
El Gobierno de Portugal está ultimando el lanzamiento de una convocatoria de ayudas para proyectos de producción y distribución de energía producida a partir de recursos renovables, que incluye una partida para componentes relacionados con el hidrógeno, que tendrá un presupuesto de alrededor de 40 millones de euros.
