Este acuerdo marca el "primer contrato ejecutado por CPA que incorpora capacidades de almacenamiento de ocho horas”, señala la compañía en un comunicado. “Muchos otros proyectos de almacenamiento en baterías de CPA incorporan tecnologías de baterías de cuatro horas. En comparación con una batería de cuatro horas del mismo tamaño, una batería de ocho horas puede descargar el doble de energía”, añade en la nota de prensa, recogida por el boletín
Energy Storage News.
La compañía no indica la tecnología que va a utilizar ni la capacidad de almacenamiento de energía, pero la duración y la potencia indicadas lo convertirían en un sistema de 600 MWh. El programa de Adecuación de Recursos de la ISO de California (CAISO), mediante el cual las empresas de servicios públicos garantizan la capacidad de las unidades generadoras, sólo exige una duración de cuatro horas para el almacenamiento de energía.
CPA es una de las muchas pequeñas empresas de propiedad comunitaria que hay en California que ofrecen a las comunidades locales una alternativa a las tres grandes empresas elécrtricas del estado –PG&E, SDG&E y SCE– cuya propiedad está en manos de inversores. Se trata de su cuarto PPA con un sistema de almacenamiento de energía en baterías (BESS).
Estos PPA se están firmando después de que la Comisión de Servicios Públicos de California (CPUC) ordenara a las entidades de carga que adquirieran nuevos recursos entre 2023 y 2026 para hacer frente a los denominados problemas de fiabilidad a medio plazo. Para CPA, esto supone que debe adquirir unos 59 MW de almacenamiento de energía de larga duración, cifra que el acuerdo de compra-venta con NextERa satisface en su totalidad.