Estas subvenciones -informa el Gobierno- serán gestionadas por la Dirección General de Energía, Minería y Reactivación. Su objetivo es "contribuir a la reactivación de la economía y a la implementación de medidas de ahorro, descarbonización y transición energética desde el inicio del próximo año". La primera línea de ayudas, cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), busca "favorecer el paso a una economía baja en carbono en todos los sectores mediante proyectos de eficiencia energética". Con un presupuesto de un millón de euros (1 M€), está destinada "a empresas de cualquier actividad (no solo industrias, sino también comercios, hostelería o servicios)". Las ayudas pueden servirle a sus beneficiarios tanto para la ejecución de "auditorías energéticas en pymes", requisito que en grandes empresas es obligatorio, como para ejecutar "acciones para el ahorro energético y la reducción de las emisiones de gases causantes del cambio climático".
Estas actuaciones -informa el Gobierno asturiano- deben posibilitar la reducción de la huella de CO2 de las empresas "y potenciar el aprovechamiento de los recursos renovables autóctonos, por ejemplo, la biomasa forestal y el calor de agua de mina, así como la sustitución de equipos consumidores de energía por otros más eficientes".
Según el Gobierno regional, en el trienio 2018-2020 esta línea ha destinado 4,81 millones de euros a 55 proyectos empresariales que, a su vez, han movilizado inversiones por 17,26 M€. Entre otros, por ejemplo, alumbrados de empresas y cambios de salas de calderas o "dos importantes actuaciones de redes de calor alimentadas con agua de mina de Hunosa, una en Mieres (con agua del pozo Barredo, foto) y la otra en Langreo (con agua del pozo Fondón)".
Renovables
La segunda línea de subvenciones, dotada con 1,5 M€, pretende impulsar "el uso de energías renovables y acciones de ahorro y eficiencia energética por parte de particulares y empresas". Por ejemplo -concreta el Gobierno-, se subvencionan "proyectos de biomasa, biogás, fotovoltaica y minihidráulica, geotermia, reforma de salas de calderas, sustitución de pequeños y medianos equipos industriales y puntos de recarga y repostaje de combustibles alternativos".
Según el Ejecutivo asturiano, en el período 2018-2020, esta línea ha aportado 3,85 millones de euros a 22 proyectos que sumaron 20,9 millones de euros de inversión. Entre otros, incluyeron la sustitución de equipos en mantequerías, materiales refractarios, actuaciones en talleres y salas de calderas, así como la instalación de tecnologías ligadas al biogás y la biomasa. También se han subvencionado puntos de recarga rápida en gasolineras.
El Gobierno asturiano concreta en su nota que "en los últimos tres años, estas convocatorias han apoyado 292 proyectos que han movilizado inversiones por 38,16 millones".