El avión Solar Impulse 2 puede volar las 24 horas del dÌa sin consumir ni una gota de combustible. Pesa tan solo 2,3 toneladas –menos de lo que pesa un todoterreno grande– aunque su envergadura es la de un avión de pasajeros de gran tamaño. Durante el viaje, que está previsto dure cinco meses, recorrerá 32.000 kilómetros gracias a unos motores propulsados exclusivamente por la energía que proporcionarán unas 17.200 células fotovoltaicas.
El piloto tendrá que mantenerse en el aire hasta cinco días consecutivos, incluídas las noches. La cabina mide solo 3,8 metros cuadrados, pocos pero suficientes para almacenar el oxígeno, la comida, el agua, el paracaídas y el resto del equipamiento necesario, incluido el asiento ergonómico, que se reclina para que el piloto pueda sentarte, estirarse y hasta hacer ejercicio.
El diseño completo de la carcasa de la cabina ha sido realizado por Bayer MaterialScience (una de las empresas patrocinadoras del proyecto), que ha empleado materiales de alta tecnología para asegurar, entre otros aspectos, un aislamiento perfecto de la cabina ya que la nave tiene que hacer frente a importantes oscilaciones térmicas, desde los 40°C bajo cero durante la noche hasta los 40°C grados durante el día. Para lograrlo, Bayer ha utilizado una espuma aislante de poliuretano cuyo rendimiento es un diez por ciento superior al de los materiales estándar que se utilizan actualmente para el aislamiento.
La vuelta al mundo está estructura en 12 etapas. El piloto de la primera etapa es André Borschberg. Recorrerá 400 kilómetros a una velocidad máxima de entre 90 y 120 kilómetros hasta Omán, la primera escala de esta gran aventura, empleando en el recorrido unas 12 horas. A partir de ahí, el avión pasará por India, China, el océano Pacífico, EEUU, el Atlántico, el sur de Europa y el norte de África, hasta aterrizar de nuevo, dentro de cinco meses, en los Emiratos Árabes.
Desde la página oficial del proyecto se puede seguir al minuto el vuelo del Solar Impulse 2, desde ver qué velocidad lleva el avión en cada momento, el estado de las baterías, la posición vía GPS del recorrido e incluso como trabajan los ingenieros aeroespaciales desde la sala de control.
El objetivo de Solar Impulse 2 es concienciar al mundo de una energía limpia y renovable es posible.