El portal NextGen (The Future of Energy) ha dado a conocer recientemente dos noticias sobre el sector del biogás que hablan del interés del Reino Unido por desarrollar esta tecnología. Por un lado, destacaba hace una semana que el ministro de Energía y Cambio Climático, Gregory Barker, tras considerar las demandas del sector había decidido que las plantas de biogás de pequeña escala (menores de 500 kW) no sufrirían la reducción prevista del 20% de la tarifa regulada a la que se paga el kWh producido.
Tanto las empresas como los agricultores argumentan que muchos de los proyectos ahora en marcha para construir nuevas plantas de aprovechamiento de residuos agrícolas y ganaderos para producir biogás no tendrían ninguna viabilidad financiera si se aplica la reducción propuesta por el Gobierno de David Cameron. El propio Gregory Barker reconoció en una carta dirigida a la Anaerobic Digestion & Biogas Association (ADBA) que la progresiva reducción de la tarifa pueda perjudicar a las plantas más pequeñas. La ADBA agradece este reconocimiento y la intención de sentarse a negociar otro marco regulatorio.
A la espera de esta revisión, la industria del biogás del Reino Unido, que cuenta con una 110 instalaciones (en España no llegan a un tercio de esta cifra), no para. El viernes pasado, el portal NextGen también informaba que una de las empresas del sector, Future Biogas, se había convertido en la primera en certificar su producción de biometano dentro de uno de los esquemas actualmente en vigor, el Green Gas Trading Limited (GGT). La planta de producción de biometano está situada en Doncaster, se ha desarrollado en colaboración con otra empresa, National Grid, e inyecta ya el biocombustible a la red de gas.