En un comunicado, ePure sostiene que "evidentemente se está produciendo un cambio inadvertido en la estructura del comercio como consecuencia directa de este acuerdo".
"Perú se está aprovechando de la eliminación de los derechos de importación de etanol por el aumento gradual de sus exportaciones a la UE y supliendo la oferta que le falta con importaciones baratas de etanol desde Estados Unidos", dice la asociación.
También sostienen: "datos oficiales revelan que las exportaciones de Perú entre enero y octubre 2013 se han más que triplicado, hasta alcanzar más de 93 millones de litros en comparación con el mismo periodo de 2012. Este aumento se produjo en apenas tres meses después de la eliminación de los derechos de importación. Se cree que la cifra será aún mayor una vez que los datos del comercio para todo el año esté disponible."
La denuncia concreta es que "Perú es sustituyendo los volúmenes que le faltan para cumplir con la demanda interna con importaciones de etanol baratas desde Estados Unidos. Muestran los datos de comercio que 84 millones de litros de etanol fueron importados desde Estados Unidos entre enero y octubre de 2013". La asociación añade que esto es "clara señal de que los acuerdos comerciales bilaterales pueden crear lagunas jurídicas que puede ser aprovechadas por otros países".
"La UE trata de proteger a su industria nacional de las prácticas desleales de comercio de los Estados Unidos a través de la imposición de derechos antidumping. Sin embargo, la incapacidad de introducir mecanismos de salvaguardia suficientes en los acuerdos comerciales bilaterales da involuntariamente a los productores estadounidenses nuevos oportunidades en el mercado mundial, una vez más, a costa de los productores de la UE", se asegura en el comunicado .
Finalmente, se cita al secretario general de ePure, Rob Vierhout, diciendo: "Es evidente que los productores de etanol de Estados Unidos están ganando en última instancia con esta operación, a expensas de los productores europeos de etanol, poniendo en riesgo las inversiones realizadas para alcanzar los objetivos de energías renovables, crear nuevos mercados para los agricultores y generar empleo en la UE".
"La CE debe actuar para prevenir los efectos de los acuerdos comerciales bilaterales mal concebidos que socavan sus propias políticas nacionales", concluye Vierhout.