Durante décadas, investigadores de diferentes universidades han tratado de desarrollar colorantes a base de hierro, pero sin éxito. La razón de esta dificultad es que la consecución de las propiedades electrónicas adecuadas en los tintes a base de hierro es mucho más difícil en comparación con otros metales. Pero donde otros han fallado, los investigadores de Lund han tenido éxito. Y su hallazgo puede redundar en un aumento significativo de la demanda de paneles solares, ya que el uso de hierro en lugar de otros metales más caros y raros logrará que la producción de células solares y receptores de luz sea más barata y respetuosa con el medio ambiente.
"En este nuevo estudio, explicamos cómo colorantes a base de hierro funcionan a nivel molecular. Con ello, logramos mejorar estos complejos de hierro para que respondan aún mejor en la absorción y el almacenamiento de la energía solar", explica el catedrático Petter Persson, del equipo investigador. "Hay un gran interés internacional en nuestra investigación. Grupos de investigación en otras partes del mundo están dispuestos a probar los nuevos tintes en otros campos de aplicación ", añade.
El desarrollo y producción a escala comercial de estos tintes de hierro aún tardará algún tiempo. Sin embargo, Petter Persson está todavía sorprendido por el rápido desarrollo: "Es difícil desarrollar nuevos materiales para la conversión de energía solar. Por una vez, el proceso ha sido inusualmente rápido, y hemos realizado varios avances importantes en tan sólo unos pocos años ".
Los resultados del trabajo han sido publicados en la revista ChemSusChem Energy & Materials.