Desde la sección de Biocarburantes de la Asociación de Productores de Energías Renovables (APPA) siguen señalando con el dedo acusador a “las importaciones desleales” de biodiésel desde Argentina e Indonesia como principales responsables de la grave situación que vive el sector: de cincuenta plantas en España, unas cuarenta están paradas y solo se produce un 10 % (500.000 toneladas) de la capacidad instalada (4,9 millones de toneladas). Según la asociación, las importaciones “prosiguieron un año más su escalada, hasta hacerse en 2012 con el 76 % del mercado español de biodiésel, frente al 74 % del año anterior”. “En este contexto –añaden–, la industria acentuó su lenta agonía con un descenso de producción del 31% respecto a 2011”.
Además de achacar este panorama a la “competencia desleal” de estos países (“aplican un sistema de tasas diferenciales a la exportación mediante las que gravan en menor medida el biodiésel que las materias primas utilizadas para su fabricación”), también buscan responsables hacia el interior. Óscar García, presidente de APPA Biocarburantes, afirma que “desgraciadamente el sector ha seguido desangrándose debido a los sucesivos retrasos acumulados en el proceso de asignación de cantidades de biodiésel, pendiente todavía de resolución”.
La industria espera a agosto para conocer sus asignaciones de producción
La famosa orden de asignación de cuotas de producción se aprobó por fin en febrero y las plantas ya han presentado sus solicitudes de cantidades. Manuel Bustos, director general de APPA Biocarburantes, recuerda que “el procedimiento sigue su curso y el Ministerio de Industria se encuentra actualmente evaluando las solicitudes recibidas”. “El plazo para la resolución de la asignación termina el 10 de agosto y esperamos que el ministerio lo cumpla”, señala.
La industria del biodiésel se lamenta de que su progresivo hundimiento se acentuó en 2012 pese al relevante incremento (29 %) del consumo de biocarburantes en gasóleo, que superó por primera vez los dos millones de toneladas, lo que permitió alcanzar una cuota del 9,5 % en términos energéticos, muy por encima del objetivo legalmente establecido. Dicho objetivo era del 6,5% y el Gobierno lo bajó al 4,1 %. Bustos afirma que “APPA Biocarburantes ya manifestó su total desacuerdo con la severa rebaja de las obligaciones de biocarburantes aprobada por el real decreto ley del pasado 23 de febrero, pero seguimos propugnando que, aunque sea progresivamente, se restablezcan los objetivos anteriores”.
El bioetanol tampoco da palmas
Sí parece contar APPA Biocarburantes con el apoyo del Gobierno en su rechazo a la propuesta de la Comisión Europea de reducir al 5 % la aportación de los biocarburantes de cultivos en los objetivos de incorporación de energías renovables en el transporte para 2020. Por otro lado, y en su deseo de llamar a todas las puertas para salvar al sector, APPA Biocarburantes ha solicitado al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas que “se restablezca lo antes posible el incentivo fiscal para los biocarburantes en presentaciones etiquetadas”. “Se está trabajando para hacerlo posible con vistas a 2014”, puntualiza Bustos.
El restablecimiento de esta medida le vendría igualmente bien al bioetanol, ya que, a pesar de no vivir una situación tan límite como el biodiésel, sus principales indicadores del mercado en España también mostraron signos claros de deterioro en 2012. En APPA Biocarburantes recuerdan que “el descenso tanto del consumo doméstico (11 %) como de las exportaciones (25 %) hizo disminuir la tasa media de actividad del sector hasta el 65 %, la más baja de los últimos años, con una producción total de unas 300.000 toneladas”.