El C-Max Energi Solar podría considerarse como el primer vehículo de su clase impulsado por energía solar gracias a que no requiere la toma de corriente normal para la recarga. Para ello, lleva el techo recubierto de paneles solares e incorpora una lente Fresnel, que actúa como una lupa, intensificando en una magnitud de ocho la potencia de los rayos de luz que llegan a los paneles.
Las células solares han sido desarrolladas por la compañía californiana SunPower, con la que Ford ha firmado un acuerdo de colaboración, mientras que el concentrador de luz es del Instituto de Tecnología de Georgia.
De acuerdo con el fabricante de automoción, en un día de luz los paneles solares del vehículo pueden cargarse tanto como si hubiera estado enchufado a la red durante cuatro horas. Y con las baterías totalmente cargadas, el C-Max Solar Energi tiene una autonomía de casi 1.000 kilómetros (620 millas). Ford calcula que el 75 % de los recorridos que realiza un conductor medio podrían realizarse con la energía que proporcionarían los paneles solares.
Además, el C-MAX Solar Energi Concept reduce hasta 4 toneladas el nivel de emisiones de un coche convencional de gasolina; o lo que es igual, las emisiones de un hogar medio americano durante 4 meses, añade Ford.
La compañía tiene ya a punto el Focus Electric, la versión eléctrica pura del Focus, y el monovolumen compacto C-MAX en alternativas eléctrica (C-MAX Electric) e híbrida enchufable (C-MAX Energi Plug-in). El C-MAX Solar Energi ha sido desarrollado sobre la base de esta última tecnología..
Según datos de la empresa, en 2013 el C-Max registró unas ventas de 85.000 unidades, superando incluso a los gigantes que se especializan en coches híbridos, como Toyota y Tesla