La eólica turca ha crecido aproximadamente un 3.000% desde 2006, según el grupo consultor KuicK Research. En 2011, Turquía instaló más de 500 MW de nueva potencia eólica, según datos del sistema eléctrico, elevando a casi 1.800 MW la cifra acumulada. Por otro lado, el gobierno ha marcado un objetivo de 20 GW eólicos para 2023 y sólo con los proyectos ya encaminados al día de hoy, Turquía llegará a contar con 10.000 MW instalados, según declaraciones efectuadas por el ministro de Energía, Taner Yildiz, durante una reunión de principios de 2012 con la asociación eólica nacional, Tureb (Türkiye Rüzgar Enerjisi Birliği).
Más ayuda pública si el promotor compra componentes de fabricación nacional turca
No obstante esos éxitos y previsiones, el mercado no acaba de despegar. Según todos los actores del sector con los que ha hablado Energías Renovables, el verdadero despegue depende de tres factores: la introducción de mejoras en las medidas de apoyo, en la tramitación de los proyectos y en la red de transporte. La tarifa reglada para la eólica, que tiene una vigencia de diez años, se sitúa en tan solo 73 euros por megavatio hora generado (MWh), "que no es mucho, para un mercado aún en proceso de despegue", según nos ha comentado un promotor español presente en el país. Existe la opción de un incentivo de 110 euros por MWh, "pero esto va ligado a unas condiciones demasiado exigentes para las empresas extranjeras, sobre todo por las exigencias de contenido local; hace falta un poco más de flexibilidad", añade. Si el promotor contrata palas a empresas locales, recibe un incentivo adicional de 6,4 euros/MWh. Si se trata de generadores y electrónica de potencia, el plus es de 7,9 euros/MWh. Para torres de elaboración nacional, la cifra es de 4,7 euros/MWh.
Todas las grandes, en la parrilla de salida
De esta manera, el informe KuicK indica que existen señales positivas importantes que despejarán el camino hacia el futuro del sector. Esta tesis viene apoyada por Cam Elyaf Sanayi, empresa de fibra de vidrio local que pretende acaparar acuerdos de suministro del material para el sector. Según ha señalado su jefe de márketing, Çagri Yurddas, en el medio Reinforced Plastics, existe un gran movimiento de grupos presionando al gobierno para apoyar el despliegue eólico debido a su potencial de creación de riqueza y empleo. Esta presión se agrega a la necesidad de reducir la dependencia energética exterior del país, que actualmente es responsable de un 70% del deficit público. Debido a todos esos indicios, probablemente, fabricantes de aerogeneradores como Gamesa, Nordex, Siemens y GE mantienen una fuerte presencia en el país. El fabricante alemán Enercon tiene una fábrica de palas en Izmir desde 2002, mientras numerosas empresas se posicionan como suministradores de componentes y materiales.